Parece que los Reyes Magos han llegado con retraso pero no se han olvidado de que los políticos catalanes han sido buenos o malos, según se mire. Para los abiertamente independentistas como ERC, y para los debutantes en estos lares como CIU, sus majestades les han dejado un paquetito. En el envoltorio una etiqueta que reza: «para que lo compartáis»; se entiende con el resto de partidos pro consulta. Y en el interior del envase una carta soberanista con la que ir al Parlament y poner las bases sólidas para lo que Artur Mas se ha empeñado siempre en referirse como «transición nacional de Catalunya», y que a la vista del resto se entiende como Independencia.  Ya existe lo que Marta Rovia, secretaria general de ERC, ha declarado como texto de trabajo entre CIU y los republicanos para declarar a Catalunya estado soberano. Los demás partidos catalanes que están a favor del derecho a decidir de los catalanes, PSC, ICV y CUP, tendrán derecho a compartir esta carta que no es Magna pero que lleva inherente el mandato real, el de SSMM, se entiende. Hay que mantener la ilusión de los niños y no tan niños mientras se pueda, ese es el life motive de la noche del 5 de enero. Eso y la venta de regalos. Aunque para algunos como el PSC, más que un regalo, este texto soberanista, se ha convertido en una carga extra de carbón, cuando creían que lo peor había pasado. Por cierto, es sabido que PPC y Ciutadans siempre han sido  más de Papá Noel, por eso ahora se han quedado sin juguetes.